En el último tiempo su nombre ha aparecido por montones, dentro y fuera de la duela, es que la explosión que ha tenido Jordan Poole en sus tres temporadas de National Basketball Association (NBA) jugando para Golden State Warriors, ha sido fugaz.
Tras un primer año como novato más bien olvidable, su rendimiento ha ido de menos a más, convirtiéndose en el aliado perfecto de Stephen Curry y Klay Thompson, a la hora de los triples, y siendo utilizado como sexto hombre por el técnico Steve Kerr.
Sin embargo, entrando en su último año de contrato con Warriors, el nombre de Poole se vio involucrado a un incidente que lo tuvo como víctima de la ira de Draymond Green durante un entrenamiento, lo que sembró dudas respecto de sus próximos pasos en la NBA.
Pero desde la franquicia de San Francisco han sido enfáticos en que el escolta está en sus planes y así lo han plasmado en esta jornada, ya que según indicaron sus agentes Drew Morrison y Austin Brown, a la cadena ESPN, el jugador ha conseguido una millonaria extensión de contrato.
El acuerdo, informa el insider Adrian Wojnarowski, indica que los Warriors le pagarán un salario de $140 millones de dólares, por las próximas cuatro temporadas NBA a Jordan Poole, en un vínculo cuyos detalles se están completando en estas horas y se hará oficial en los próximos días.
